Justos Por Pecadores
La desagradable sensación es que en este posible confinamiento que ya nos amenaza pagarán justos por pecadores: aquellos que han cuidado con esmero los protocolos del ocio y del negocio, acusarán las imprudencias de los que han ido amontonándose en terrazas y restaurantes, perdiendo la cabeza, tanto dueños como clientes.