Asustados
En ocasiones el mundo nos viene grande. Una catástrofe como la ocurrida en Japón, observada desde la barrera, nos conduce a pensar que hasta el país mejor pertrechado tecnológicamente es vulnerable a la brutalidad de un azote imprevisible de la naturaleza. De pronto, lo que no ha sido barrido por una gigantesca ola es amenazado por la radiactividad y lo que antes fuera el escenario de múltiples vidas se convierte en un territorio fantasma. Dado que comprender el alcance de tanto dolor ajeno es imposible y que el sentimiento de solidaridad siempre contiene una especie de alivio vergonzante por no haber sido tocados por la catástrofe, tratamos de aliviarnos con una mirada a lo doméstico, y lo que aquí nos encontramos es tan aburrido como irracional. Más de lo mismo. Más de lo mismo, en España, significa que puede salir el sol por Antequera, o sea, que el grado de provisionalidad es notable.
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